25 mar 2013

¿El segundo Francisco de Asís?


Jorge Mario, como te gusta que te llamen, hoy decidí escribirte, no soy nadie; un simple laico, comprometido con el menos favorecido, el oprimido y los niños, 3 grupos de personas -por así decirlo-, bastantes recriminados y dejados en el limbo por la Iglesia, sin olvidar, claro está; a la mujer. (Para los que no saben uso la palabra limbo como alegoría, pues, en sí, no existe).

Cuando te eligieron Papa, millones nos sorprendimos, teólogos de la liberación, teólogos progresistas, “vaticanólogos”, en fin, la mayoría del mundo católico se estremeció al escuchar al protodiácono en latín: Georgium Marium… cardinalem Bergoglio. Personalmente esperaba el nombre de Angelo Scola. Más aún cuando el mismo dijo: Franciscum. ¡Dios mío, un Papa con nombre en honor al poverello de Asís (fue lo primero que imaginé)!

¡Hasta ahí todo cuadra! Pero, ¿por qué escribirle al Papa sabiendo que ni me leerá? Sencillamente porque los blogueros nos “conformamos” con que nos lea la gente del común, y, por supuesto aquí dejo mis razones, plasmadas en este sencillo escrito.

Has hecho gestos de admirar, no llevaste la muceta con adornos de oro que sí usaba Benedicto XVI. Te inclinaste para recibir la bendición del pueblo antes de darla. Llevas un pectoral de metal, anduviste en tu primer día como pontífice en un bus y no en el lujoso Mercedes-Benz. Cargas un anillo de plata bañado en oro (el de pescador) y no de oro puro. Tus zapatos son los mismos, esos viejos con los que recorrías las calles de Buenos Aires y no los finos Prada que usaba tu predecesor. Renuncias al sillón de oro por uno sencillo. Te bajas del papamóvil para besar a niños y enfermos. Das la bendición sin hacer signo de la cruz con tu mano por respeto a ateos y no católicos.

En fin, humildad tienes, pero, Francisco; no es todo. Tú puedes, con el poder de jefe de estado (cosa con la que no estoy de acuerdo) y “pastor supremo”, renunciar (vender o donar) el anillo, ornamentos (vestimentas) papales, el cayado, mitra, solideo, etcétera, sobre todo -renunciar-, a los miles de millones de dólares que posee el Vaticano. Eres noble, no lo dudo, pero en tus manos está la nación más pequeña y poderosa de la tierra.

De nada sirve que hables bonito si no empiezas a construir una Iglesia pobre, como bien lo has dicho. Sé que hay jerarcas en la Iglesia enamorados del poder y el dinero y ellos serán el primer obstáculo e impedimento para tus planes, pero así vivió Francisco de Asís. El primero en oponerse a que renunciara a sus riquezas fue su padre, Pedro Bernardone. ¡Pero lo hizo, arriesgándose a servir nada más que a Dios!

Debes decir públicamente que no te llamen Santidad, Santo Padre o ni siquiera padre, reservémosle esos honores a Dios, el verdaderamente importante. Camilo Torres Restrepo decía: “aunque sea un sacerdote y tenga un doctorado, no me llamen padre ni doctor, llámenme, mejor; señor”. Que te llamemos simplemente Francisco, como si fueras del barrio, diría Jaime Garzón, no para abusar de tu confianza o amistad, sino para verte como un hermano en quien confiar. Como si ya te conociéramos.

Debes empezar renunciando al magnánimo museo del Vaticano, el más fastuoso del mundo, con el que, probablemente se alimentarían a miles de familias. Pídele a tus hermanos obispos y hasta sacerdotes, que renuncien a sus camionetas de miles de dólares. Y que anden como lo hacía Jesús; llenos de amor por el pobre y siempre dispuestos a servir. Que vayan por los fieles, no que los fieles vayan por el pastor. ¿Será difícil? Sí, renunciar a la riqueza es difícil para aquél (guía espiritual) que se enamoró de ella y no de Dios.

Francisco, tú tienes el poder de volver a la Iglesia de Cristo; la Iglesia pobre y llena de amor que era en los principios del cristianismo. Pero también tienes el poder de seguir con una Iglesia atrasada, como dijo el cardenal Martini, reprimida, seguida por fieles del montón y olvidada totalmente de lo que predica; el Evangelio.

Apártate de la política y los palacios vaticanos, compra una casa sencilla a las afueras de Roma como decía don Helder Cámara y dona todo a la UNESCO. O empieza por algo, renunciar a algo del todo es duro, pero no imposible.

Si Jesús de Nazaret llegara en estos momentos se pondría enfadado (es más, debe estar iracundo con muchísimos cristianos), así como cuando llegó al templo y encontró una plaza de mercado en la Casa del Padre. Seguramente lloraría al ver que ninguna religión o pastor predican lo que él enseñó. ¡Ninguna!

Vas bien, Francisco, pero si no renuncias a las riquezas del Vaticano no harás nada, aunque admiremos tus signos de humildad, debes arrancar el problema de raíz. Entrega a los más de mil presbíteros pederastas, efebófilos y pedófilos a la justicia ordinaria y quítales su licencia para ejercer su ministerio. En temas doctrinales no espero ningún cambio, pero quiero, ante todo, que se haga justicia.

San Francisco de Asís, El verdadero hermano de Cristo como ha sido llamado, se despojó primero de sus telas finas y a su millonaria herencia paterna, y ahí empezó su difícil, pero fructuosa tarea; predicar el Evangelio con su vida (testimonio) y amar al prójimo y la naturaleza (astros, animales, ecología) como a sí mismo. Lo llamaron loco, sí, qué importa, a Jesús le dijeron borracho.

Tú puedes si así lo quieres (de hecho, haces honor), ser el segundo Francisco de Asís y el segundo hermano de Jesús, solo depende de ti. “Ojalá tengas lucidez para hacer real la Iglesia de los Pobres, y que esta deje de ser iglesia de abundancia, de burgueses y ricos”. Jon Sobrino

“Francisco, restaura mi Iglesia”. Le dijo el Cristo de san Damián a Francisco de Asís.

Píldora: no espero cambios en el sacerdocio, o sea; seguirá el celibato para presbíteros, nada de sacerdocio para mujeres. No oportunidades para parejas divorciadas, cero sexo (abstinencia total), cero abortos, nada de condones, en fin, temas doctrinales complejos. Pero algo que sí espero para el cambio, es que el papa viva como Francisco de Asís y que "antoje" a vivir así.

21 mar 2013

¡Sea atrevido!


Según la RAE, la palabra atrevido hace referencia a determinarse a algún hecho o dicho arriesgado. Pues bien, ahora me voy a atrever a hablar de atrevimientos. ¡Qué atrevido soy!

Esta sociedad sin duda alguna, está escasa de gente intelectual, ufff, de eso nos llevan años luz los extraterrestres, que, son tan inteligentes que no se atreven a venir a conquistar este planeta tierra lleno de ignorancia, insolidaridad e insignificancia. Entonces, viene bien decir que, estamos faltos no solo de lo antes dicho, sino también de atrevidos.

Por ejemplo, debemos ser atrevidos y luchar por el otro, el que nos necesita, el oprimido, el solitario, el rechazado, el que nadie quiere, el pobre, el vagabundo (mal llamado), mejor digámosle persona de calle, el huérfano, la viuda, el desconsolado, el triste, el odiado, el abandonado. Tantas personas que hay para ayudar; ¡y no nos atrevemos!

Atrevámonos a querer a los niños, los frágiles y humillados por sus padres, hermanos y gente del común que, en ciertas ocasiones los ven solo como un objeto que hay querer, pero no como una persona que hay que educar. ¡Atrevámonos a amarlos y verlos como un eje fundamental en nuestras vidas, más aún; de la sociedad!

Por qué no atrevernos a querer cada día a nuestros familiares, a los pocos amigos, a los vecinos, a esos que nunca vemos, a apreciar su cercanía o energía desde lejos. ¡Atrevámonos a decirles que son parte de nosotros!

Atrevernos a querer un mundo mejor, pero, sobre todo a vivir atrevidamente como atrevidos que quieren atreverse a ser mejores. No solo con atrevimientos de palabras bonitas, sino con atrevimientos de gestos creíbles.

Atrevámonos a decirle a la chica que nos tiene locos que estamos atrevidamente locos por ella, a la mujer que queremos; que la queremos. Nada se pierde en el atrevimiento de decirle a una persona que es indispensable para nosotros, pero que si nos rechaza debemos atrevernos a vivir.

Atrevernos a perdonar al que nos ha ofendido. Las amistades se han perdido por banos atrevimientos, y no se recuperan por no reconocer un atrevido error. ¡Atrévase a ser pequeño; para que el otro –atrevidamente-, lo mire como un gran atrevido que conquistó la cima con humildad.

Atrevámonos, principalmente, a hacer justicia y luchar por nuestros derechos, y, atrevámonos a no quitárselos a los demás.

No es más que un corto atrevimiento el que me atrevo a escribir, porque si no me atrevo a escribir atrevidamente, atrevidamente no podré tan si quiera vivir.

¡Arriésgate a ser atrevido!

7 mar 2013

¡Gracias, Chávez!

Las fechas del 28 julio de 1954 y 05 marzo de 2013 serán inolvidables para los venezolanos. Para historiadores y para cualquier hombre comprometido con el socialismo y la revolución del siglo XXI. Estas fechas marcaron la historia; un antes y después de Hugo Rafael Chávez Frías, el Comandante Presidente más querido por el pueblo bolivariano, luego del Padre de la patria; Simón, el libertador.

No es para menos. Chávez cambió totalmente Venezuela y con él llegaron los cambios en otros países latinoamericanos, sumisos al vasallo país del norte (EE. UU.), pues, vieron en Hugo un ejemplo de mandatario. Y así fue. El comandante, hijo de maestros, de escasos recursos, de niño vendía dulces para ayudar al sustento de su hogar. Era el segundo de seis hermanos. El mismo que quería ser beisbolista profesional, que su madre -la profe Elena-, quería que fuera sacerdote (fue monaguillo), que por alcanzar su sueño (en el deporte) se convirtió en suboficial, pero que terminó siendo Presidente de la República de Venezuela.

Fue un hombre pobre, luchador. Quería lograr su objetivo primordial como fuera, hasta que se encontró con el yugo de la opresión, la tiranía y la pobreza en su amada Venezuela; ahí comenzó todo su cambio. Ya no soñaba en irse para Estados Unidos y triunfar en las grandes ligas, sino que, las ganas de ayudar al otro, al rechazado lo hicieron cambiar de parecer. Nace un Chávez distinto. Dispuesto, ya no  a vivir por sus ideales, sino las de un grupo de personas; que luego se convertirían en millones; una Nación y un continente.

Dicen que cuando era capitán del ejército se echaba discursos de político. Y no era para menos. Siempre fue muy inteligente. Su memoria era muy audaz y verosímil. Dicen que cuando hablaba, los demás oficiales se meaban -literalmente hablando-, de miedo. En fin, hasta el mismo Imperio supo que ningún líder político -aparte de Fidel Castro-, tenía las agallas de Chávez.

Chávez era del pueblo, para el pueblo y con el pueblo. El Comandante sacó de la pobreza a 8 millones de venezolanos, les dio educación, salud y vivienda gratis. En Colombia, en seis gobiernos (24 años), la pobreza aumentó al 20%. Es decir, aproximadamente 9 millones de colombianos viven en la miseria. El otro 60% tan solo tiene educación media y viven de un miserable salario mínimo y tan solo el 10% posee educación superior. Y aún así me preguntan: "¿por qué apoyas a Chávez?"

Cómo no admirarlo, si amó a su país de verdad. Tenía los pantalones bien puestos, como decimos en Colombia. Quiso igualdad para todos, no para unos cuantos; por eso lo odiaban, pero eran los ricos. El pueblo, el que manda, siempre lo apoyó. Los capitalistas no lo querían en el poder, pues, no podían cometer usuras. Con Chávez, todo era para el pueblo.

Defendió a capa y espada su país. Supo sacar provecho del "oro negro" (petróleo) y entregar las ganancias a los menos favorecidos. Por eso las lágrimas, el desconsuelo, la tristeza. ¡Se fue un líder de verdad! José Mujica, presidente de Uruguay, dijo: "erradicar la pobreza en el mundo es muy fácil, pero para eso necesitamos unos cuantos Hugo Chávez". ¡Qué sabio, 'Pepe'!

"Era malísimo porque en su primer período como presidente alfabetizó a 2 millones de venezolanos. Si eso es ser malo, pues entonces; era el diablo" afirma el escritor Eduardo Galeano.

Gabriel García Márquez en 1999 escribió: "habrá dos Chávez. El del pueblo, el liberador y el déspota (para los capitalistas). Y se cumplió. Adorado por sus seguidores y aborrecido por sus oponentes; los ricos.

Tantas cosas buenas hizo Hugo, que no caben en este post, solo traigo a colación que era un gran líder. Hizo que los venezolanos se sintieran de verdad venezolanos. Que amaran a su tierra. Luchó incansablemente por la patria. Creía en Dios a pesar de sus discusiones con los jerarcas de la Iglesia. Eso no lo hacía menos fiel. Cargaba en su cuello con una camándula de 100 años de antigüedad y era devoto de la Virgen.

Su lema, del amor tan profundo por su pueblo era: "vencer o morir", luego de su enfermedad la cambió por: "viviremos y venceremos". No pudo contra el cáncer, pero dejó millones de chavistas que vencerán las ambiciosas ganas de poder de los enemigos del pueblo. Ya no solo hablaremos de José Martí, Camilo Cienfuegos, 'Che' Guevara, Fidel Castro (líderes de los siglos XX-XXI), sino que, los niños y jóvenes deberán, más bien; tendrán que saber quién era Hugo Chávez. ¡Otra leyenda!

Venezuela lamenta una enorme partida. Irremplazable. Un llanero de sepa. De pueblo. América Latina, también, pues son líderes escasos, que ya casi no vienen y si los hay son callados (asesinados) por la terrible peste de oligarcas que solo quieren lucrarse y oprimir a sus compatriotas. 

¡Gracias, Comandante! ¡Descanse en paz! ¡Viva Latinoamérica libre y unida!



3 mar 2013

¡Máxima Creación!

Hermosa, sinigual, corajuda, osada, cual flor que en primavera nace. Tiene más sentidos que un humano normal, claro, no es para menos; son como diosas.

Si fue Dios, la evolución o hasta una explosión; no importa, es el ser que mejor se desarrolló. ¡Una obra de arte! Su mejor fortuna es que tienen las capacidades que ningún varón posee. ¡Y nunca tendrá!

Ella rie, sufre, llora, goza. La humillan, pero nunca humilla. Es fiel, servidora, cariñosa, siempre está, no se cansa, escucha, mira, ayuda, soporta, es líder (no jefa), plasma, crea, en fin, lo tiene todo; siempre es buena; nunca es mala. ¡Es una bendición! ¡El mayor acierto!

La amalgama perfecta. Sin ella nada tendría sentido. El hombre sería vacío; incompleto. La sociedad estaría más podrida de lo que actualmente está. Sin ella no existiría vida, amor, esperanza. Los grandes escritores, compositores, poetas, genios, escultores, no han podido descifrar el no sé qué (o sea; mostrar verdaderamente su majestuosidad) que las caracteriza. Todos quedan cortos cuando a ellas se refieren. Son incompletas sus sabias e intelectuales mentes al tratarlas o al menos hablar de ellas.

Ni Neruda en sus poemas pudo 'matarlas', ni Einstein con su ciencia pudo crearlas.

Pueden tener vida en su vida, traer al mejor regalo en sus vientres, soportar los inmensos dolores, fatigas, cansancios por el amor de sus vidas; sus hijos. Ni el hombre más macho o varonil de todos podría ser como ellas. No lo soportaría ni un día. Son tan impecables que son las únicas con la capacidad y el don de ser madres. ¡Sinónimo de perfección!

Sí, mujeres, sin ustedes no seríamos nada y no tendría motivo vivir. Quite usted de la vida del hombre a la mujer y vea la crisis que generará. No recalco a ninguna en especial, pues; todas son especiales. Traigo a colación una descabellada frase, sobre todo para los machistas que siempre oprimen a las féminas por no ser hombres: ustedes valen más que nosotros. ¡Ni la naturaleza es tan bella como la mujer!

Varones, si ustedes van a criticar a una mujer, antes vuélvanse como ellas y luego sí critíquenlas.

Para concluir dejo el 'Prototipo de una mujer exquisita', escrito por el nobel de literatura (1982) Gabriel García Márquez: "Si aún no has pasado el bisturí por tu piel, si no tienes implantes de silicona en alguna parte de tu cuerpo, si los gorditos no te generan trauma, si nunca has sufrido de anorexia, si tu estatura no afecta tu desarrollo personal, si cuando vas a la playa prefieres divertirte en el mar y no estar sobre una toalla durante horas, si crees que la fidelidad sí es posible y la practicas, si sabes cómo se prepara un arroz, si puedes preparar un almuerzo completo, si tu prioridad no es ser rubia a como de lugar, si no te levantas a las 4:00 a.m. para poder alcanzar a hacerte el blower, si puedes salir con saco de sudadera tranquila a la calle un domingo sin una gota de maquillaje en el rostro... Felicitaciones, estás en vía de extinción".

Feliz día; máxima y perfecta creatura de la creación.