20 dic 2014

Señor Jesús: ¿cuándo volverás?

Señor Jesús, tú que luchaste por los pobres, desamparados, oprimidos, desahuciados, abandonados, enfermos, despreciados. Tú que te hiciste como ellas y ellos, tú que prometiste volver. Tú, que eres Dios hecho hombre, ¿cuándo volverás?
Estamos en adviento hace dos mil años. Y el incesante fuego quema las llagas más y más. Por favor, te lo suplico, ven pronto, no te demores. Todo se volvió un gran misterio, ¿cuándo volverás?
Las niñas y niños claman tu amor, yacen en las calles, en los orfanatos, en las orillas de los ríos, en las drogas, en el alcohol, en la guerra, en el desamor, en el transitar de una vida injusta susurrando: ¿cuándo volverás?
No quiero reprocharte nada, no es culpa tuya lo que ocurre, sin embargo, hay mujeres maltratadas, abusadas, violentadas, humilladas, viudas, tristes, y ante el clamor de la soledad gritando: ¿cuándo volverás?
Las y los afros, gais, inmigrantes, alvinos, las y los habitantes del mundo, ante una sociedad opresora y nefasta, exclaman: ¡¿cuándo volverás?!
Tú, Señor, que bajaste de la Cruz, te hiciste carnero, cuidaste, protegiste, ayudaste y sobre todo amaste a los que te clamaban sin cesar, hoy te pregunto, a pocos días de tu natalicio: ¿cuándo volverás?
La víspera de tu cumpleaños, ya no será igual, todas y todos festejan en alarde y al compás de un ring-ring el móvil no los deja departir. A las y los más necesitados, solo los ayudan las y los más necesitados, es cierto: solo se ayudan entre sí, ya la caridad perdió su amor, el compartir aniquiló su fin, pero la esperanza prevalece y la fe en ti nos acontece, para decir una vez más, sin juzgarte, mas con necesitarte: ¿cuándo volverás?

18 dic 2014

El farisaico y táctico Estados Unidos

Nada más inteligente y astuto para los Estados Unidos que darle un golpe de gracia a Cuba y así tratar de entorpecer las relaciones entre la isla con Venezuela y Rusia. Los gringos juegan muy bien, saben que, para debilitar al país con mayor arsenal y la reserva más grande de petróleo en el mundo, se le golpea con su mejor aliado (Cuba). Puedo hacer una analogía bíblica muy conocida: Judas entregó a Jesús para lograr una hazaña inimaginable ('salvación del mundo'). Ahora bien, nadie más oportuno que el mejor amigo (Judas) porque es quien mejor lo conoce a uno (en ese caso: Jesús) para entregarlo a los malhechores. ¿No ocurre, luego, en la vida real? Ya lo dice el adagio popular: «Muerto el ahijado, terminado el compadrazgo».

No soy hiperbólico ni fantasioso, las cosas hay que verlas como son. Además, hay que reconocer que el país yanqui pasa un mal momento por sus infortunios (racismo, xenofobia, asesinatos, inmigración, ataques a naciones en Medio Oriente, apoyo armamenticio a repúblicas en guerra, invasión a territorios extranjeros, violación de derechos humanos, etcétera) y nada mejor para callar al mundo y apaciguar las cosas que restablecer relaciones con el primer país comunista del continente americano, con quien tienen estrechas relaciones, apoyo económico y comercial (refiérome a Venezuela y Rusia).

Dos titanes no pelean entre sí, buscan la manera de debilitar al otro, de crear confusión, terror, enemistad, y ahí sí dar la estocada final. Los pugilistas saben cómo noquear al rival con sus tácticas, técnicas y ágiles movimientos,  de lo contrario, golpean y se adueñan del ring hasta que el otro 'tira la toalla'. De manera que, haciendo una metáfora deportiva, utilizada principalmente en el boxeo: existen luchadores (países) golpeadores, defensivos, contraofensivos.

Siendo así, el país isleño no será más que un chivo expiatorio por el cual los del norte buscan desestabilizar a las naciones mencionadas, jugando al amigo bueno que, al final de cuentas, busca mantener su poderío e imponer el nefasto capitalismo (haciéndonos creer que es bueno) aunque cada vez devaste al mundo. No podemos perder lo que con mucho esfuerzo, sangre y hasta con su propia vida han conseguido nuestros héroes latinoamericanos, esos mismos que recuperaron la dignidad de este pueblo saqueado y colonizado. ¡Marx, Lenin, el Che, Martí, Cienfuegos, Bolívar y Chávez nos libren de esta!

9 nov 2014

Antitaurinos, ¿y los demás animales qué…?

Admiro a los antitaurinos por el coraje y valentía con el que luchan por los toros, sin embargo, creo que deberían —también—protestar contra las peleas de gallos, de perros, el coleo, las corralejas, la caza campestre, la superpoblación en las que se crían los pollos de engorde, los pájaros enjaulados, el transporte de tracción animal (zorras), las aves desplumadas, las fístulas antiéticas que les propician al ganado bovino, los animales usados como experimentos: ratones, simios, conejos, los que son utilizados por los estudiantes de veterinaria y zootecnia (principalmente en la disección y para adquirir un mejor conocimiento —en práctica—  de la anatomía de algunos de estos seres).

De igual manera están, en los parques marinos, los delfines (el animal más inteligente, pero que está condicionado a cierto espacio para entretener a turistas), las morsas y demás animales que son puestos en cautiverio (con permiso de los gobiernos, obvio aquí prima el lucro). Los animales, como los humanos, son libres, nosotros cometemos delitos y tenemos una consecuencia legal, ¿ellos qué mal han hecho? ¿Qué están pagando? ¿Es un castigo de quién? Claro, recordemos los zoológicos, donde se priva y son hechos sumisos del bárbaro y déspota ser humano, de los circos a los cuales muchos de nosotros asistimos alguna vez.

Por otro lado yacen las ovejas, las cabras, los cerdos que igualmente son objetos de experimentos en laboratorios médicos, los caballos y yeguas que son montados por quienes les gusta el ‘deporte’ de la equitación y en cabalgatas por tipos de más de 100 kilos de peso por más de dos horas. La ignorada vivisección que todavía se utiliza con propósitos comerciales y de supuesto aprendizaje. Las muchísimas e inadecuadas formas de maltrato, en donde se vulnera el bienestar animal y su vida, con los propósitos de investigar, lucrarse y la más despreciable de todas; el supuesto 'arte' (jugar y asesinar a estas especies que sienten dolor al igual que nosotros).

Así que, con el respeto de mis amigos animalistas y antitaurinos, creo que, aunque el toro de lidia sufre, no es menos el dolor injustificado y despreciable al que son sometidos los diferentes tipos y clases de animales. A parte del daño físico y psicológico, es inminente y —debería ser— execrable cualquier tipo de injusticia y punibles para quienes utilicen estas praxis inadecuadas con seres irracionales, pero, al parecer, somos otros los que no pensamos. Si bien es cierto varias de estas inadecuadas formas de vida no se dan en Colombia, no exime para luchar por ellos, pues; ¡también tienen derechos!

13 oct 2014

¿Por qué el ébola, a pesar de todo, no es tan trascendental?

No soy profesional de la salud, pero esto no me exime —como ciudadano del mundo— para preocuparme y darle la suficiente relevancia para escribir sobre este virus que está golpeando fuerte y principalmente, a los países pobres de África. Hasta el momento van más de 4.000 muertos por esta mortal enfermedad, la mayoría de estos decesos, según la OMS, se han dado en Guinea, Liberia y Sierra Leona. Lo fatal de este brote es que hay un riesgo de mortalidad del 90% (Ib. Datos oficiales).

Aquí lo más preocupante para mí es que, pese a que este virus es letal, no se le ha dado trascendencia inminente, como debería, pues las víctimas son, como lo mencioné anteriormente: personas pobres y para rematar; son negros (lo digo porque la humanidad, pese a todo, es sumamente racista y xenófoba). No han pensado que si la cepa de este virus hubiese mutado en un país conocido como potencia mundial ¿ya se habrían tomado las medidas preventivas para evitar su expansión? Mejor aún: ya existiría la vacuna para este mal. Pero los infortunados, como cosa del destino, tuvieron que ser de nuevo los pobres. ¡Qué cosas, ¿no?!

Lo paradójico es que, solo hace 60 días, la OMS declaró este virus y su enfermedad como «emergencia pública sanitaria internacional», más claro: cuídense, países, porque ataca (de nuevo, ya había aparecido en el año de 1976) un virus peligroso, que pone en riesgo la salud de los humanos. Ahora bien, otro perjuicio es que el virus también ataca a algunas especies de animales, los más perjudicados son los simios y los murciélagos (estos últimos, dicen que son los originarios del virus). 
 Lo cierto es que esta epidemia podría volverse pandemia de no tratársele y dársele la importancia significativa que esta merece, algo difícil, porque los damnificados son habitantes de naciones en vías de desarrollo.

 A nivel mundial, los aportes más apremiantes son los de China, que envió 59 expertos (entre médicos y técnicos) y Cuba, que expidió 165 médicos, enviados a los tres países más infestados, para luchar contra este voraz virus. En América, lo sorprendente es que hubo preocupación no porque el virus haya llegado al continente, sino porque el primer caso se dio en Estados Unidos, ahí sí empezó la emergencia, porque tocó al país intocable.

Ojalá hallen cura para este virus y cese la venganza de la naturaleza, tal vez, contra los países más pobres de la tierra, esos mismos que, cuando no los ataca el hambre, los embiste una enfermedad. ¡Dios nos libre!

5 oct 2014

Las diez mil becas de Santos y algo más

Tan generoso nuestro Presidente,  condenará, digo; condonará 10 mil becas para que estudiantes sobresalientes en las Pruebas Saber puedan acceder gratuitamente a la educación universitaria. Pero, no nos han dicho: ¿Quiénes las pueden obtener? ¿Qué pasa si el beneficiario deserta del estudio? ¿Por qué 10 mil becas y no empleo a los neoprofesionales? ¿Puede competir un Icfes alto de estrato bajo con un Icfes superior de estrato alto? ¿Hay beneficios alimentarios, de vivienda y transporte suficientes para que los estudiandos se dediquen únicamente a su academia (teniendo en cuenta que se dirigen a personas de escasos recursos)? ¿Son, las personas pobres, los mejores Icfes del país? ¿El Icfes garantiza que un buen estudiante de población marginal se quede sin estudios superiores solo por no sacar un puntaje alto? ¿Para cuándo infraestructura, pedagogía y maestros de calidad en la educación básica primaria y secundaria? ¿Hay oferta laboral con salarios dignos para cuando se gradúen?

Aquí viene lo más ‘terrible’: entre el 55 y 60% de los jóvenes que ingresan a estudios superiores han obtenido puntajes altos en las pruebas Icfes y el 56% de estos, sus padres ganan más de 9 SMLV (Datos del MEN), paradójicamente, entonces, los estudiantes estratificados con Sisbén 1 y 2 (a los cuales Santos aspira ‘ayudar’ con becas), en realidad, no serán los mejores Icfes del país, sino que, asumirían este riesgo quienes obtengan un ponderado de nivel medio en estas pruebas que cualifican cómo está la educación de un estudiante.

Listo, sabemos ya que hay 10 mil becas y toda la parafernalia, lo que no nos cuentan es que el 49% de esos becados, como es común en Colombia, desistirán de sus estudios por alguna razón, o sea que,  en consecuencia, la deuda no será financiada por el Gobierno sino por el dimitente. Ahora bien, el meollo de todo esto es que, si con esta promesa ocurre lo mismo que con el programa de las cien mil viviendas, prometidas en el 2010 y que hasta la fecha no van ni la mitad, se salvarán cientos de estudiantes de ser esclavos del Icetex.

Ojalá estas líneas sean en vano y estos diez mil honoríficos académicos sean promisorios a corto y mediano plazo en Colombia, aunque, no soy negativo ni pesimista, solo veo la realidad que injustamente hemos padecido con estos mandatos neoliberales. ¡Muchachos, sálvense de esa hecatombe estatal!


27 sept 2014

¿Dónde están los Franciscos de Asís?



Giovanni Bernardone, mejor conocido como (san) Francisco de Asís, es el personaje canonizado más famoso de la historia del catolicismo gracias a su semejanza con Jesús de Nazaret. Un joven normal, que disfrutaba la vida parrandeando y compartiendo con sus amigos, decidió entregarse a Dios en extrema pobreza, cuando leyó que en las Escrituras el Maestro les dijo a sus apóstoles que no llevaran dos túnicas, ni alforja, ni dinero en la faja, sino una túnica y unas sandalias (Cf. Mc. 6, 7-10), en pocas palabras les indicó que no fueran avarientos, que vivieran como él, desprendidos de lo material y preocupados únicamente por servir a los demás.

Pues bien, esto mismo nos concierne como cristianos, no era solo para los seguidores de aquel entonces ¿no somos, luego, discípulos del Señor? ¡Ah, claro, en estos casos nos hacemos los locos! Tal vez uno de los pocos cristianos que ha continuado el legado de Cristo ha sido Francisco de Asís, o como le dicen en Italia (tierra de donde es patrón): Il poverello (el pobrecillo).

Fue tan grande que, renunció a una vida suntuosa para dedicarse a los menos favorecidos, a los leprosos, a los que todos rechazaban, amó a los animales, a los astros, a la naturaleza; sus hermanos y hermanas, como fraternamente les llamaba. A él, solo a él, grandes teólogos lo han calificado como ‘el gran hermano de Cristo’. No es para menos. Además de todo, fue el primer ser humano en padecer los estigmas de Jesús. A esto, san Buenaventura (biógrafo de Francisco) dijo que, «por disposición divina el santo de Asís quedó totalmente transformado en expresa semejanza de Cristo crucificado».

Pero a qué viene todo esto, sencillamente porque los prosélitos cristianos ya se están extinguiendo, lo digo porque estamos repletos de cristianismo, no de cristianos. Como dice el obispo Pedro Casaldáliga: «Es fácil llevar a Jesús en el pecho, lo difícil es tener pecho, coraje para seguir a Jesús». Aquí todo se ‘complica’ y nos quedamos en ser fieles de nombre, porque de obras y hechos, nada que ver. 

Según cuentan, el cambio de este hombre fue cuando Dios, en sueño, le hizo una petición: «Francisco, restaura mi Iglesia» Y sí que lo hizo. Ahora, Dios —seguramente— nos diría: «Creyentes, hijos míos, sean Iglesia, sean creíbles» Y complementaría «¿Dónde están los Franciscos de Asís?»

18 sept 2014

Proselitismo religioso en las escuelas

La mayoría de instituciones educativas de nuestra ciudad son (o tienen bases) católicas, pues gracias a la jerarquía eclesiástica y grupos de mujeres religiosas (conocidas como monjas, aunque, debo aclarar: las monjas son aquellas mujeres que viven enclaustradas, a las otras se les conoce, por costumbre, como hermanas)

Profesores, por un solo niño que no sea católico no debe hacerse la señal de la cruz, santiguarse o echarse la bendición en un salón de clase cuando se va a hacer una oración. Pues, es una forma de proselitismo y de excluir a los niños o adolescentes de otras religiones el decir el nombre de Dios (para los no católicos: Jehová, para los católicos Yahvé), ya que se vulnera el derecho a la libertad de cultos (Art. 19 de nuestra Carta Magna).

Sí, aunque usted no lo crea, practicante fidedigno, al no respetar la creencia de una sola persona está vulnerando el derecho a la libertad de conciencia y religiosa. Por cierto, ya imponen mucho algunos maestros con métodos retrógrados y antipedagógicos, como para que ahora quieran hacerlo con la religión que profesan. ¡Ni más faltaba!

Ahora bien, en algunas instituciones se celebran eucaristías en signo de acción de gracias por un beneplácito que han recibido o por algún acto piadoso de tradición (Miércoles de ceniza, por ejemplo), si bien soy católico, esto también objeta e irrumpe en la libertad que tienen los estudiantes, pues si alguno llega a negarse, simplemente se le aplica una dosis de disciplina, porque es casi que, me atrevo a decir: obligatorio asistir a estos actos de devoción popular.

Por eso, educadores, es respetable que cada uno crea en Dios, aunque si algún niño o adolescente decide no hacerlo, no busque usted maneras para convencerlo de que sí existe una deidad, eso también es parte de la libertad, reitero: no la margine. Tampoco le diga que se va a condenar, ¿no sabe usted, acaso, que ni Judas Iscariote es precito a la casa de Satán?

En definitiva, sea mejor prójimo y maestro de sus alumnos y no predicador de aquellos que lo único que anhelan es que les respeten sus derechos y su libertad religiosa. Ni el mismo Jesús se molestó porque los judíos no creyeron en él.

5 sept 2014

El Chávez nuestro

Ha causado mucha polémica, sobre todo en los creyentes católicos, por el poema (no oración) que escribieron y declamaron los militantes del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) a uno de los líderes más grandes que ha tenido América Latina; Hugo Chávez Frías. El meollo es porque, dicen: se ofende al Creador (Dios) pues esta (el Padrenuestro) es nuestra oración por antonomasia.

La trifulca está dizque por exaltar el nombre de este libertador del siglo XXI, y todo, claro está, es porque el susodicho es de izquierda. Seguramente, si hubiera sido en honor a un oligarca, a un curuchupa que exprime al pueblo, se hubiera aplaudido el gesto y hasta se leería en las escuelas y parroquias. Trato la realidad desde Colombia, donde nos indignamos más con lo que pasa afuera que con nuestros propios problemas.

Ahora bien, debemos conocer y entender que lo que los chavistas hicieron, además de ser un poema, es una paráfrasis del Padrenuestro, sin sentido teológico alguno, pero sí con el fulgor de un acto liberador, de las esperanzas que infundió el Cdte. Chávez en Venezuela y la Patria Grande. Basta recordar la elegía que escribió el gran Pablo Neruda al libertador más grande de América; Simón Bolívar (Lea aquí los versos http://xurl.es/4y2uv). 

Por otro lado, Pedro Casaldáliga (un obispo católico, miembro de la teología de la liberación) dice algo real: «Él trató de romper, y rompió el esquema [de dominación]. Por eso, la derecha, hace todo por quemar a Venezuela, insisten en quemar a Venezuela. En los diarios y noticieros, cada día tiene que aparecer algo negativo de Venezuela». (Aquí la entrevista donde dijo estas palabras http://xurl.es/1ixwl) Es totalmente verídico. ¿O han escuchado, ustedes, noticias buenas y positivas sobre la hermana república? No, y jamás las escucharán o leerán en los principales medios internacionales.

Para terminar, debemos tener en cuenta, los creyentes en Dios, que los honores que le hacen a Chávez no afectan nuestra fe ni irrespetan el Padrenuestro, esos cuatro gritos de esperanza que exclamó Jesucristo son adaptadas a la realidad. ¿Acaso no necesitamos una liberación profunda y digna para nuestros pueblos?

Si a la Iglesia jerárquica y suntuosa se le hace escandaloso y pecaminoso este acto de reconocimiento a Chávez, pues debería parecerle más repugnante e inmoral los miles de casos de pederastia que han cometido los curas y por los cuales hay un silencio profundo. Y eso por no mencionar la insania con la que actuó en la edad media.

Comandante, «no nos dejes caer en la tentación del capitalismo, mas líbranos de la maldad de la oligarquía».

16 ago 2014

Ser maestro

Para comenzar, quiero citar a un célebre brasilero, filósofo, teólogo y escritor: “No andes por caminos ya andados, de lo contrario nunca dejarás huellas” (Leonardo Boff).

Ser maestro es —o debería ser— la profesión única, inigualable, incomparable, pero —infortunadamente— ya la estamos conociendo como una más. Imprescindible, sí, pero al alcance de cualquiera. Y no es que menosprecie a nadie, claro que no, lo que pasa es que ahora ser maestro se ha convertido —por lo menos en Colombia— en el trabajo de los fracasados. Puede que generalice, pero es una realidad. Muchos neoeducadores no están por vocación, sino por remuneración. Y eso que la paga es mínima.

Estamos en crisis, pues ser maestro es llevar dentro de sí esas ganas de aprender y de enseñar. De investigar y de indagar. De guiar y de acompañar. De educar y ser educado. De conocer los métodos de aprendizaje y ser eje de los nuevos estilos de construir conocimiento. Frei Betto, también carioca y profesor de teología dice: “El gran enemigo de los países latinoamericanos es la educación bancaria”. Y precisamente eso es lo que no debe ser un maestro (alguien que se las sabe todas); porque “Enseñar no es transferir conocimiento, si no crear las posibilidades de su producción o de su construcción” (Pedagogía de la autonomía, Paulo Freire). Eso, para mí, es el ser maestro.

Asimismo, ser maestro es motivar a los demás a ser libres, autónomos, críticos, pensadores, constructivos, pacificadores, progresistas. No oprimiendo, esclavizando, ni subyugando al educando con mecanismos de educación retrógrada que, en vez de hacerlo productivo, lo vuelve súbdito de una pedagogía intolerante a la sociedad que nos estamos enfrentando. Ser maestro, además —como dice el adagio— no es dar pescado, sino enseñar a pescar. Por eso, el maestro se convierte en un acompañante del proceso de aprendizaje.

Ser maestro implica —a su vez— ser dialécticos: educando-educador se forman entre sí. Es concientizar al estudiante en la forma en que vivimos y ayudarnos mutuamente a transformar la realidad discriminadora en la que nos encontramos. Nos involucra, de este modo, en un proceso liberador.

Concluyendo, ser maestro no es establecer normas, reglas y métodos anacrónicos, sino llevar y aportar lo mejor de sí al educando. El profesor ha de ser una persona con vocación y pasión, no aquel que hace una carrera porque no le quedó de otra. El maestro debe pensar, ante todo, no en su bienestar, sino en el de los demás.

7 ago 2014

¡Santos, el mayor!

A propósito de la posesión de cuatro años más como Presidente de la República de Colombia de Juan Manuel Santos, no soy pesimista con lo que van a leer, solo cuento la realidad a través de estas líneas. ¿Qué nos esperará si somos pasivos ante las privatizaciones y concesiones que el gobierno usufructúa en favor del neoliberalismo y el capitalismo devastador con el ser humano y la Pachamama? Pues, estaremos entregando -nuevamente- nuestro país a las multinacionales. Seguirán con más zanganería las privatizaciones en educación y salud. El habitante de a pie cada vez tendrá de lejos la posibilidad de adquirir una vivienda digna para poder vivir.

Con lo anterior, entonces, el desempleo subirá, el rubro para la guerra aumentará (así el Presidente diga que el % en PIB será mayor en educación). Habrá más TLC’s que exterminan al agro, a las pequeñas y medianas empresas y vuelve, de lógico, a los pobres cada vez más pobres y a los ricos, ya no cada vez más ricos, porque es obvio, sino cada vez más malos, más inhumanos. A las personas, pareciera, que se les educara para ser egoístas y para buscar el bien individual.

No, no soy pesimista. Solo que un burgués como Santos no quiere progreso para el país. Eso nunca. En cambio sí lucro para él y su círculo de alcahuetes y subyugadores amigos. No más en educación estamos supremamente mal (para poner un ejemplo). Xabier Gorostiaga, un jesuita español decía algo que en Colombia, con estos gobiernos proyanquis, al menos nunca ocurrirá: “Debemos liberar de la pobreza a la educación, para que la educación libere de la pobreza a nuestros pueblos”. Aquí parece que esto es una utopía. Claro, a los opulentos qué les va a parecer bueno que una persona de escasos recursos estudie y piense. Pues así se liberan los pueblos. Bien lo pregonaba Ernesto Guevara: “Un pueblo sin educación, es un pueblo fácil de engañar”. Si ven, por eso es que aquí nos 'enreda' cualquiera.

El meollo principal está, lo expreso en palabras de Jaime Garzón: “El país está así porque en Colombia no hay colombianos”. No queremos lo propio, solo nos sentimos cafeteros cuando estamos lejos del país. Pero mientras estamos acá “recordamos banalidades y olvidamos lo trascendental”. Claro, a un trabajador de una petrolera qué carajos le importa el ambiente o que las tierras se sequen, lo importante es que él se embolsille un par de milloncitos.

En fin, no más parafernalia, no espero nada positivo de este gobierno, si firma la paz, que lo mueva, o qué, ¿cuántos personas más tienen que morir para que cese el fuego? ¿O cuántos senadores más se van a pasar Candy Crush mientras se debate en el Congreso?

Solo queda esperar que los pocos honorables políticos que tenemos en el Senado (entre ellos los cinco del Polo), nos defiendan a capa y espada como bien lo han hecho, de la opresión en la que nos quieren seguir hundiendo estos avasalladores como el Presidente. Reitero: no soy pesimista. Termino, pues, para que puedan escuchar a Santos por segunda vez y que, como bien lo dijo Jaimito Garzón: “El presidente nunca se dirige al país, se digiere al país”. Y si antes fue Santos, el menor, preparémonos porque llegó Santos, el mayor.

25 jul 2014

Iglesia, Vaticano y fe

Indudablemente, para entender estas líneas, debemos apartarnos de todo fundamentalismo religioso, por eso aquí, sin ser un perito en teología, hago unas breves aclaraciones de lo que es Iglesia, Vaticano y fe.

Los creyentes católicos debemos tener algo muy claro:

La Iglesia (Gr. ekklesia, «iglesia» Asamblea/hermandad de los que creen en Cristo) es aquella institución establecida por Jesús de Nazaret hace más de 2 mil años. El Vaticano es un estado y el lugar donde se esconden figuras clericales que, en su mayoría, nada tienen que ver con el pobre Hijo de la Virgen María. Y la fe, es tener la esperanza liberadora y salvífica de que algún día mejorarán las cosas, que no todo está perdido y por supuesto: es la prueba fervorosa que tenemos los que creemos en Dios (Cf. Hb. 11, 1).

No es pecado, ni delito en Colombia hacer críticas, sobre todo cuando mi propósito no es hacer juicios, sino darle a entender a la gente lo que erróneamente sabe o mal le han enseñado.

Por eso, puedo decir que:

-Se puede ser de la Iglesia sin pertenecer ni rendir pleitesía al Vaticano (así nos quieran execrar y se crean los dueños de la verdad. “Me molesta que la Iglesia jerárquica todavía se crea dueña de la verdad”: Felipe Berríos, S.J.).

-También, podemos hacer críticas al Vaticano sin el mínimo temor (ese que nos han metido los curas) de que vamos a ser castigados por Dios o porque no tenemos fe. Habrá que recordarles a estos ‘principescos’ que: “Jesús era un profeta provocador que se mostraba crítico con el templo” (Hans Küng, La Iglesia católica, 2002).

-Por supuesto, la fe no compromete a ningún estado (Vaticano), pero sí a la Iglesia de la liberación, la misma que Cristo amó y fundamentó, especialmente en los marginados y más necesitados (niños, pobres, enfermos); esa misma que hace mucho tiempo olvidaron los mafiosos del Vaticano.

Es menester aclarar que Jesús es de todos (no solo para una religión que se apoderó de él), el Vaticano es de pocos y la fe no se pierde, se acrecienta y madura.

Perfecto lo dice Jon Sobrino S.J., “El poder eclesiástico ha traicionado a Jesús”. Claro está, entonces: Iglesia, Vaticano y fe; son distintos.

11 jul 2014

Los homosexuales en las iglesias

Para nadie es un secreto que las personas gays y/o homosexuales son, en su mayoría, diría un 99%, vituperadas, vulneradas, rechazadas y abandonadas por las iglesias, las mismas que pregonan el amor al prójimo. Esa gran enseñanza que dejó Jesús de Nazaret (Cf. Lc. 10, 27). Aun cuando en algunas (poquísimas iglesias), son acogidas, estas lo hacen con gran recelo, desprecio y arrogancia.

El Señor mismo, en su tiempo, liberó de una enfermedad (quizás venérea) a un amante de un centurión romano (Mt 8, 5-12). El capitán se sentía tan deshonrado que le dijo al Maestro: «No soy digno de que entres en mi casa» (Cf. Lc. 7, 6). Pero era verdadera su fe, pues replicó: «Señor, da la orden y mi criado quedará sano» (Lc. 7, 7). Y, efectivamente, el hombre (amante: homosexual) quedó sano.

Tal vez a los fanáticos religiosos no les guste esto, pero es la realidad. ¿Acaso un militar de alto rango va a querer (amar) tanto a un simple soldado como para mandar sanarlo? Es preciso aclarar que: «los soldados no solían vivir con la familia ni cuidar sus hijos hasta después de licenciarse» (Xabier Pikaza, Ph. D. en teología).

Si buscamos en la Biblia, que es la principal fuente que utilizamos los cristianos y las iglesias para hablar de cualquier tema en la sociedad, nos sorprenderemos (como en el caso anterior), pues los pastores (de cualquier denominación), están llevando el mensaje antievangélico de condenación y no de liberación; de esperanza. Los están condenando (con citas como: Rm. 1, 27; 1 Cor. 6, 9). Lo dice la Sagrada Escritura, pero: ¿acaso Jesús no vino a traer la Buena Nueva a todas las gentes?

Ahora bien, el jesuita John McNeill (teólogo y psicoterapeuta, retirado de la Compañía por ser homosexual), ha expresado hace poco: «Lo que deberían hacer (los gays) es presionar a la Iglesia (yo agrego: las iglesias) para que renuncie a su homofobia, no renunciar ellos a su iglesia. ¿Por qué dejarle la Iglesia a tus enemigos homofóbicos?» Y agrega que: «Con su discurso antigay tan fuerte, muchos que eran gays, perdieron la esperanza de encontrar amor y compañía, y se sintieron tan avergonzados y culpables que terminaron suicidándose. La Iglesia (católica, principalmente) debe asumir responsabilidad por toda la destrucción que ha provocado y pedir disculpas». (Aquí la entrevista completa: http://goo.gl/B5Semf).

Benedicto XVI durante su pontificado había expresado: «Salvar a la humanidad de las conductas homosexuales o transexuales es igual de importante que evitar la destrucción de las selvas» (Vea las declaraciones del dimitente Papa: http://goo.gl/0laOMz)

Recordemos que el Papa Francisco ha dicho, en su viaje de regreso de Río de Janeiro al Vaticano (Julio de 2013): «¿Quién soy yo para juzgarlos (a los homosexuales)?». También, uno de los grandes cardenales, Carlo Maria Martini, S.J., manifestó en su testamento espiritual: «Si dos gays desean firmar un pacto (matrimonio) para dar una estabilidad a su pareja, ¿por qué queremos que no sea así?» (El País 7-sep-2012).

Asimismo, el también jesuita, Felipe Berríos (fundador de la organización Un techo para mi país), ha dicho recientemente: «¿Cuál es el problema del matrimonio homosexual? Los homosexuales son hijos de Dios. Él los creó homosexuales y lesbianas, y Dios está orgulloso de que lo sean. ¿Cuál es el problema de que se casen? ¡Basta ya!» (Pueden ver acá la entrevista del programa El informante: http://goo.gl/ROcLeS). Ya, como era de esperarse, el cura Berríos está siendo vilipendiado (Puede interesarle estas declaraciones malsanas de un obispo hacia él: http://goo.gl/CeRKvK).

Debo aclarar que no escribo catilinarias contra las iglesias, sino que quiero, a través de estas líneas, salir en ‘defensa’ de los homosexuales y demás comunidad LGBTI que merecen ser feliz y vivir normalmente, como seres humanos que son, sin reproche alguno por su condición sexual.

Por eso, esas iglesias que rechazan a los gays y/o homosexuales (sea cual fuere), no debe considerarse «Asamblea de los que creen en Dios»; pues ni Jesús de Nazaret, máxima representación humana y divina, los despreció. ¿Por qué, entonces, nosotros (creyentes) los tenemos que despreciar?

19 jun 2014

Si soy profesor de su hij@

He sido un crítico acérrimo de la educación tradicionalista, convencional, retrógrada, bancaria o como la quieren llamar, al fin y al cabo, esa forma de enseñar es perjudicial para el conocimiento de los estudiantes y, por supuesto, para el progreso de un pueblo o país. Este es un problema serio en nuestra Nación, entre muchas otras cosas, porque no se invierte lo necesario para tener calidad (en infraestructura e instrumentos que motiven un conocimiento académico) y en la baja preparación de los docentes.

Sin embargo, para no aburrirlos, aquí traigo unas propuestas por si algún día soy profesor o facilitador en la educación de sus hijos.

Si soy profesor de su hijo, prometo no enseñarle a repetir que la eme con la a es ma, pero sí a saber que nuestra má es la más importante de la familia.

Si soy profesor de su hijo, prometo no enseñarle a sumar, restar, multiplicar o dividir, pero sí a que tenga en cuenta para qué sirven estas cuatro operaciones básicas y que son elementales en la vida del ser humano.

Si soy profesor de su hijo, prometo no enseñarle que hijueputa es pecado o grosería, pero sí a compartirle que las cosas aparentemente malas son más escandalosas que las verdaderamente malas.

Si soy profesor de su hijo, prometo no enseñarle que Hidrógeno, Helio, Litio, Berilio, Boro (momento, ¿qué es boro? ¡Juemadre, me robaron!) son los primeros cinco elementos químicos de la tabla periódica, pero sí a enseñarle que los elementos químicos son para ellos: los químicos.

Si soy profesor de su hijo, prometo no dejarle esas güevonadas de Baldor, pero sí a enseñarle que ese man estaba muy aburrido cuando nos quiso joder la vida.

Si soy profesor de su hijo, prometo no enseñarle que si nos portamos mal se irá al infierno, ¡no!, mentiras no enseñaré. En cambio le diré que todo acto bueno, tiene consecuencias buenas.

Si soy profesor de su hijo, prometo no enseñarle dónde queda el Golfo de Morrosquillo, pero sí a hablarle del gran libertador Simón Bolívar.

Si soy profesor de su hijo, prometo no enseñarle a colorear ni a enseñarle a dibujar, pero sí a que experimente su arte con las paredes del salón y los instrumentos musicales.

Si soy profesor de su hijo, prometo no decirle que él (o ella) es el futuro del país, sino a hacerle caer en la cuenta que es el dueño de sus sueños, y el motor del tiempo presente.

Si soy profesor de su hijo, prometo no enseñarle contenido temático, pero sí a mostrarle que él (o ella) es la inspiración propia de crear nuevos conocimientos.

Si soy profesor de su hijo, prometo no joderlo por cómo se vista, por su corte de cabello o sus medias tobilleras, pero sí a enseñarle que hay personas que los necesitan afuera y que por ellos vale la pena la espera.

Si soy profesor de su hijo, prometo no enseñarle que tiene que ser tratado como rey, príncipe, reina o princesa, sino a ser un luchador o luchadora, corajudo y revolucionaria, batallador y liberadora, que él (o ella) tiene el cambio en sus manos y que la monarquía es lo peor que le ha pasado a los pueblos.

Si soy profesor de su hijo, prometo no ser el mejor ni el único, pero sí el gran ejemplo que necesite, el guía, apoyo, facilitador, educador, maestro y, sobre todo: el amigo que necesita, pues “Los hombres no se hacen en el silencio, sino en la palabra, en el trabajo, en la acción, en la reflexión” (Paulo Freire).

Y, si soy profesor de su hijo, sea usted también el profesor que él (o ella) necesita. La educación la hacemos todos.

¡Vamos por la libertad de la educación,
por una pedagogía de la esperanza que libere al oprimido!

8 jun 2014

Así no es, doctora Clara López

Doctora Clara, yo creo en su política, en su profesionalidad, en su carácter de mujer firme y valiente, conocedora de los problemas del país y de querer cambiar esta realidad que día a día nos atemoriza y nos lanza al abismo sepulcral. Respeto su decisión de votar por la paz. Recuerde que usted como candidata a la Presidencia dijo que la paz debe ser una política de Estado y no una promesa electoral en la cual se escudan los políticos para ganar adeptos.

No sé cuál sea su propósito y no la juzgo, pero hacerle campaña, sí, eso está haciendo al Presidente Santos, va contra los principios del Polo Democrático, va contra lo que usted ha promovido en su vida política. Ya cayó en esa ambigüedad. Y creo que no es justo para los que confiamos en usted. Una cosa es apoyar con el voto, otra muy distinta es hacer campaña a un oligarca neoliberal que entrega el país a las multinacionales, que tiene en la quiebra al campo, que hace de la educación un negocio y no un derecho y tantas otras cosas que usted sabe. Así no podemos.

Mientras sectores de derecha y de ‘izquierda’ han criticado al senador Robledo por ejercer su ejercicio democrático de votar en blanco, muchos (que curiosamente llaman sectario al susodicho) le hacen matoneo virtual, en medios de comunicación y en persona. Así no es, doctora Clara López. Usted pudo tener su esguince político, sin embargo confío en su talante, pero así no se puede.

¿De cuándo acá votar en blanco es estar de acuerdo con X o Y candidato? Eso jamás lo había escuchado. Esta locura solo ocurre en Colombia. Decir que Robledo se alió con Uribe para poder hacerle oposición es lo más ridículo que alguien puede expresar en pre de los comicios más importantes del país. Afirmar que Robledo solo se preocupa por él es ilógico y no va con los ideales que tanto lo han identificado y que, además, ha defendido a favor del pueblo menos favorecido, del pequeño productor y de los que no tienen voz, para que no sean vulnerados sus derechos.

Uno puede apoyar las negociaciones de La Habana, pero no así, doctora Clara López. Es cierto que ya nos cansamos de tanta violencia y que esta guerra tiene que acabar. Pero queda el Eln, las Bacrim, la delincuencia común, las Águilas negras. No, esto aquí no termina, la paz la hace el pueblo y los indignados por las ‘proezas’ que han hecho los mandatarios que solo les interesa el bien de ellos y unas pocas familias ricas, dueñas de la Nación.

Yo no me imagino la lluvia de críticas que le van a caer en uno o dos años. Es inútil apoyar a alguien con el que siempre hemos discrepado. Aunque urge la necesidad del fin del conflicto de esta guerrilla, no podemos entregarnos en bandeja de plata y luego seguir criticando al Gobierno. Es una falacia. Y aclaro: votaré por la paz, pero no le hago campaña a ninguno de los dos candidatos. Caería en el error intransigente de creer que hay un mal menor.

1 jun 2014

¡“Se va como una moto”!

¡Espectaculares, fenomenales, monstruosos estos ciclistas colombianos! Quién iba creer que estos escarabajos iban a ganar semejante carrera la que es el Giro de Italia. Quién pensaría que dos cafeteros serían los grandes triunfadores de una de las mejores competiciones ciclísticas del mundo. De pronto ni nosotros lo pensamos, creímos, seguramente, que iban a ganar etapas, pero no el Giro. ¡Esto es enorme, descomunal!

Sí, lo de Nairo Quintana y Rigoberto Urán no tiene comparación, un campesino y un chancero, hacen lo que en Colombia es difícil de soñar y lograr, vencer a las grandes maquinarias (ellos le ganaron a esos 'invencibles' y competitivos europeos), nos enseñan que sí se puede ser los mejores, pero solo lo lograron con disciplina y perseverancia. Nadie les regaló nada. El triunfo cuando huele a sudor y lágrimas es mucho más satisfactorio. Ellos nos devuelven la fe de creer en este cuento que se llama Colombia.

Aquí resalto algo muy bonito que pocas veces se ve en un gaucho, sí, un argentino, Mario Sábato, ese señor que narró todo el Giro por ESPN, ese que nos hacía emocionar cuando un escarabajo salía en la pantalla. Ese mismo que narraba: “Se va como una moto”, nos entusiasmaba como ‘Naironman’ y ‘Rigonator’ (como se conocen ahora a nuestros ciclistas). Mario decía: “Go, Rigo, go. ¡Vamos colombianos, vamos Latinoamérica!”. Sin Mario, la carrera hubiera sido simple. Él mismo dijo: “Es el día de encanto para el deporte colombiano”. Ni la Copa América ganada por la Selección en el 2001 fue tan emocionante.

Este día debe ser recordado por todos, debemos superar el 05 de septiembre del 93 y recordar con más gloria el 01 de junio de 2014. Sí, cambiar el día que el fútbol le ganó a Argentina, por el día que dos colombianos vencieron a los mejores pedalistas del mundo. ¡Qué gladiadores!

Si usted escuchó una narración de Sábato, debe saber que esa alegría, ese entusiasmo, ese júbilo, ese orgullo patrio que siente un argentino que no es colombiano es enorme. Eso necesitamos: pedalear en nuestra vida como Nairo, Rigo y el Team Colombia, y poner el alma a lo que hacemos como Mario Sábato. ¡Gracias, muchachos! “Suenen las cumbias, suenen el vallenato, que Colombia es el mejor”, dijo Mario.

13 abr 2014

Llega Semana Santa y...

En estos días se llenan las parroquias e iglesias del mundo católico, curiosamente, para estas fechas muchos son católicos. Qué bueno, yo también lo soy, pero ¿somos católicos de verdad? ¿O solo de Semana Santa y Navidad? Alimenta el espíritu y enriquece el corazón, buscar a Dios, orar y pensar en el gesto que Jesús hizo por nosotros; inmolarse en una cruz para salvarnos del pecado, del egoísmo y de la envidia que nos destruye como seres humanos. Porque, aunque usted sea una denominación o religión diferente, crea o no en Cristo, él se entregó por la expropiación de nuestros pecados. Los de todos.

Me viene a la mente algo que siempre he preguntado, si en la Semana Santa renacemos y hacemos compromisos en cuaresma, en el Triduo pascual (Jueves, Viernes y Sábado santo) y, supuestamente, vamos a ser hombres y mujeres justos, de acuerdo al Evangelio, ¿por qué seguimos así? La respuesta, para mí, la da José Antonio Pagola (teólogo español): "Admiramos al crucificado, pero ignoramos a los que están crucificados (pobres, desprotegidos, oprimidos, sufrientes, dolientes, marginados)". ¿Acaso no es verdad?

Estos días, que llamamos Semana Santa (que es la Mayor semana de todas) por los acontecimientos tan importantes que conmemoramos nosotros los cristianos, la pasión, muerte y resurrección del Señor. Vale la pena preguntarnos, ¿es nuestra fe testimoniada y vivida de acuerdo al mensaje evangélico del Nazareno? Él, que luchó por los más desprotegidos de su época (pobres, niños y los enfermos) y nos mandó que hiciéramos lo mismo, ¿lo hacemos?

Porque, claro, es bonito ir a una iglesia y tener ese recogimiento que encontramos en Dios, alabarle, cantarle, escuchar y meditar su Palabra; es loable, nos da un gozo que no encontramos en otra acción humana, pero, no basta llenar los templos estos días, pues lo dice claro un mártir de nuestra era: "Una religión de misa dominical, pero de semanas injustas; no agrada al Señor". Mons. Óscar Romero.

Los cestos de las parroquias se llenan, damos ofrendas y limosnas. Muchos dicen hacer “ayuno” dizque porque no comen carne, en cambio se tragan una cachama de una libra, con ensalada, plátano, yuca, arroz y sacian el apetito famélico ¿y los pobres? Asistimos una hora (hasta más) a nuestros oratorios, santuarios y capillas, pedimos por la justicia y la paz del mundo, pero un habitante de calle pasa por nuestra casa, mientras comemos nuestros manjares, pidiendo algo de comer y somos tan descarados que decimos: “no hay nada”. ¡Por favor, qué clase de cristianismo es ese!

Estos días de reflexión espiritual, queremos ver a Dios, y en la mayoría de veces no sabemos dónde encontrarlo (a parte de las iglesias), pues bien; Dios está en ese que mendiga comida, en ese hombre o mujer que pide a gritos ayuda y que muchas veces ignoramos, en los niños, en los enfermos, en los oprimidos, en todo aquel que despreciamos. Ahí está Cristo, ahí está Dios.

Como anhelamos estar con Dios, que sea del todo y auténtico aquello que deseamos manifestar, es claro, lo recalca el obispo salvadoreño: “La religión no consiste en mucho rezar. La religión consiste en esa garantía de tener a mi Dios cerca de mí porque le hago el bien a mis hermanos” (Óscar Romero). Esos hermanos que son  el pobre, el oprimido, el rechazado, el abandonado, el marginado, el violentado, el abusado, el habitante de calle, el enfermo, el abuelo, el joven, el niño, el indígena, el campesino, el blanco, el negro, la prostituta, el gay, el estudiante, el profesional. Qué bueno es vivir estos días siguiendo esta tradición católica, no obstante, si nos olvidamos de ellos, será en vano cualquier acto popular de fe que vivamos.  Lo dice la Biblia: “Una fe sin obras, es una fe muerta” (Stg. 2, 26).

2 abr 2014

Por qué votar por Clara López

Es común escuchar y leer comentarios de colombianos indignados justificando el mal gobierno de nuestros presidentes, pues dicen: “Eso es lo mismo, al fin y al cabo siempre van a robar”. “¡Eso no hacen nada por el país!”. “Lo único que quieren es robar al pueblo, nada más”. Bueno, y con toda esta triste historia que tenemos en Colombia, son válidas y aceptables sus premisas, pues la conclusión es la misma. Cada vez estamos peor. ¡Qué infortunio!

Yo los entiendo. El ruego es de más de 30 millones de compatriotas. No aguantamos más. Colombia rompe récords en pobreza, en desempleo, en minas antipersona, en desplazamiento, en educación paupérrima, en violencia infantil y contra la mujer, en desigualdad, y por supuesto: en injusticia. Queremos visitas de extranjeros y que se lleven la mejor imagen de nosotros, claro, si van a los mejores hoteles, a las tierras afrodisíacas, a las islas suntuosas. La imagen es positiva, y como en esos lugares lo que importa es el dinero que se deje, se trata bien al turista. Obviamente la característica principal de nosotros los cafeteros es la amabilidad y simpatía con los que vienen de afuera. Pero, ¿y con los nuestros?

El asunto es que nosotros mismos nos clavamos el cuchillo, teniendo por quien votar y elegir a una excelente persona a la presidencia, para que cambie el rumbo de este país; no lo hacemos. Ahora que se repite la historia, que estamos a punto de salvar a Colombia o de terminar de hundirla, tenemos la oportunidad más que nunca de darle un giro de 180° a este país, dizque del Sagrado Corazón.

La mejor propuesta que tenemos (y es que no creo que haya otra buena, más con los 3 candidatos que tiene Uribe Vélez: Martha Lucía Ramírez, Óscar Iván Zuluaga y Enrique Peñalosa). OJO: son 3 sus candidatos.Y el actual Presidente y candidato, que por las sendas del neoliberalismo tiene abarrotada a la Nación en un océano de desbordamientos apolíticos y desagradables (mencionados arriba). Es hora de ser sinceros con nosotros mismos y con los millones de colombianos que esperamos el cambio, que anhelamos unas regiones prósperas y agradables, porque: ¡Colombia sí tiene arreglo!

Puede sonar profético, pero no lo es: Clara López en coalición con la compañera Aída Avella, del Polo Democrático Alternativo y la Unión Patriótica, tienen la llave, junto con su equipo de asesores, para sacar a Colombia del abismo donde está. ¡Sí podemos resurgir! ¡El cambio es ahora! No podemos seguir votando por los mismos y ahogándonos nosotros mismos, sabiendo que tenemos con qué progresar. Es que, creo que no queremos salir de esta. Ellas y los que confiamos en su ardua labor, nunca ofreceremos nada a cambio por un voto (como ya es común y “normal” en los comicios electorales). Clara y Aída, sin duda alguna, son la mejor opción presidencial que se nos puede presentar en esta ocasión.

Cuentan con el apoyo, por si fuera poco, del mejor senador de la República y el congresista con más votos en las últimas elecciones; Jorge Enrique Robledo. También, con los dos mejores representantes a la Cámara del país: Germán Navas Talero e Iván Cepeda Castro. O sea: equipo hay. La calidad es segura y firme. Las hojas de vida de Clara y Aída son intachables, perseguidas políticamente y en el caso de Avella, exiliada política, con un recién atentado contra su vida. ¿Por qué sería? Porque ellas traen el cambio. No hago analogía mesiánica, pero traerán la salvación, es fiable y necesario cederles el turno a ellas.

Los ejes fundamentales de Clara y Aída están basados en la: Paz, democracia, soberanía social y justicia social. Un plan transversal y congruente a la realidad social e injusta en la que estamos.

Entre muchas otras, ellas proponen:
  • ·        Educación gratuita y de calidad.
  • ·        Educación superior gratuita con calidad e investigación.
  • ·        Reducir la importación y aumentar la exportación (agro).
  • ·        Revertir los TLC.
  • ·        Reformar el sistema de salud (para todos, no para uno$).
  • ·        Empleo digno (pleno empleo, mejorar condiciones de vida).

(Para mayor información recomiendo visitar: @ClaraPresidente, @ClaraLopezObre y @AidaAvellaE. Y en las páginas web: polodemocratico.net y wp.claralopez.org. Donde encontrarán su amplio plan de gobierno si llegaran a ser elegidas Presidenta y Vicepresidenta de la República).

Por supuesto, yo creo que es indispensable conocerlas y no juzgarlas por ser de izquierda. Es cierto, las guerrillas del país han marginado la clase política socialista y siempre nos dicen guerrilleros (Recomiendo leer mi post: Soy de izquierda, no de las Farc http://xurl.es/qsejf). ¡Qué bestialidad este parangón! No lo somos, a diferencia de muchos colombianos, reconocemos lo mal que está el país, pero que, a su vez, somos consecuentes de que sí tiene arreglo y representados con estas dos mujeres valerosas y corajudas, podemos lograr el cambio. Necesitan el voto de confianza, no en ellas, sino en el país. Los más desfavorecidos la necesitan. Ya el capitalismo, como bien sabemos, han pasado y regalado esta tierra a los ricos, arrebatémoselo; nos pertenece. Ellos lo enmugraron; ¡limpiémoslo! Sí podemos, hay con quienes.

Clara ha dicho, para terminar, algo verdadero y creíble, tiene una petición: “Denme cuatro años y les dejo la casa en orden”. Y le creo, pues las mujeres, que son más juiciosas que nosotros los hombres, más guapas y sinceras, tienen la capacidad, pero necesitan el poder para hacerlo. No es misógina la frase, no, pues miremos la casta política de varones presidentes que hemos tenido: ¡volvieron fiesta el país! El turno es para las mujeres. Yo les doy mi confianza.

Sé que no me van a dar progreso a mí, lo darán a millones de compatriotas. Este será el gobierno de la verdad, el de todos, el pobre, el oprimido, el rechazado, el abandonado, el marginado, el violentado, el abusado, el habitante de calle, el enfermo, el abuelo, el joven, el niño, el indígena, el campesino, el blanco, el negro, la prostituta, el gay, el estudiante, el profesional e inclusive el gobierno que acoja a los de oposición. ¡Todos, por un país mejor!


Por eso, hago la invitación a votar este 25 de mayo por las mujeres, vota por el 01: Clara López y Aída Avella, la mejor fórmula presidencial.